Ted´A Arquitectes. Can Picafort. Ladrillos perforados y despieces como argumento expresivo.
Más módulos.
Más cerámica.
Con enjarjes maravillosos.
Juntas y no juntas.
Ritmo y modulación.
Artesanía y armonía.
¿Quién no conoce la vivienda de Can Picafort de TEd´A arquitectes?
Es el empleo con maestría del bloque de termoarcilla, del pavimento de terracota, del hormigón, del mortero, del ladrillo perforado, de la madera.
De cómo manejar el matiz tonal y la composición. Todo está alineado, encajado, modulado. Nunca aburre, es ultramoderno y sorprendente.
Los propios mecanismos eléctricos ni siquiera se encastran, se muestran sin vergüenza, modulados de dos en dos.
Y para rematar: barandillas con redondos de acero. Mayor sinceridad constructiva no es posible. La textura del propio material le da carácter y fuerza sin perder calidez.
Si esto no es cuidado por la materialidad… no sé qué es lo qué es.
⌂ Arquitectos: TEd´A arquitectes
📸Fotografía: Luis Diaz Diaz. Fuente: Web de Ted´A Arquitectes
Estudio DIIR: Arquitectura que se funde con interiorismo. Unas oficinas que materializan su filosofía profesional y vital.
Cuando cada pieza
es un proyecto,
y el interiorismo
es detalle constructivo.
DIIR practica la sinceridad constructiva.
El programa de usos de su proyecto se articula en tres crujías: de mayor a menor privacidad, con los servicios y las zonas húmedas en el centro.
Cada pieza de mobiliario, de carpintería y de albañilería es un ejercicio expresivo, donde se combinan la investigación estructural y visual. Para los autores, reformar no es revestir: es sostener, proteger, aislar.
Manejan tres bloques de materialidad: “mundo madera, metal y piedra”.
A ellos se suma el ladrillo: la base de las mesas es de la misma cerámica vista que las particiones, con junta mínima.
La mesa de aluminio en voladizo se adhiere al forjado con estructura de acero. El proyectado de celulosa en el techo también soluciona el aislamiento acústico. Y los sistemas de iluminación refuerzan la geometría planificada.
Interiorismo pensado que muestra toda una filosofía.
⌂ Arquitectura: DIIR
📸Fotografía: David Zarzoso. Fuente: Tectónica
Ludwig Godefroy y su Casa TO. Un templo introvertido de hormigón.
Una piscina de hormigón
en el corazón del edificio,
material que trepa y se expande,
para conectar sin aburrir.
Esta hermosa residencia de Puerto Escondido quiere parecerse a un templo oaxaqueño.
El empleo del hormigón le otorga carácter y monumentalidad.
Forma parte de todos sus componentes, tanto verticales como horizontales: forjados, escaleras, muros de carga… y también configura el mobiliario de obra.
Pero lo que realmente dota de vida al edificio es la riqueza de las texturas que emergen de los encofrados y del acabado artesanal a mano.
⌂ Arquitecto: Ludwig Godefroy
📸Fotografía: Jaime Navarro Fuente: Archilovers
Langarita Navarro y su vivienda en Tarifa. Un forjado que es una metáfora de las olas en el mar.
La belleza del continente es tal,
con su forma y materialidad,
que no es necesario un disfraz.
El sistema de forjado en zig zag permite grandes luces que sustentan la cubierta ajardinada.
Bajo dicha cubierta, soportes de madera y muros y pilares en uve.
Las inclemencias del viento del Atlántico pueden ser siempre más llevaderas en este prisma tallado frente al mar.
⌂ Arquitectos: Langarita Navarro.
📸Fotografía: Luis Díaz. Fuente: Web de Langarita Navarro